La Prevención Del Suicidio Desde La Comunicación En La Familia

La familia, una pieza clave en la prevención del suicidio. Los miembros de nuestra familia generalmente son las primeras personas que intervienen cuando identifican un cambio en nosotros; te ves triste ¿qué te paso?, te ves cansado ¿dormiste bien?, te veo estresado ¿pasó algo en tu día?, ¿por qué estas tan contento hoy? La cercanía que logramos desarrollar con los miembros de nuestra familia nos permite conocernos mejor, es por esta razón que nuestros familiares logran identificar fácilmente los cambios en nuestros comportamientos y/o en las actitudes. También debemos resaltar que nuestros familiares son quienes nos apoyan incondicionalmente cuando requerimos ayuda. Desde nuestras familias comienza la promoción de un bienestar mental.

La comunicación es una herramienta promotora para del bienestar mental. Hablar de nuestras emociones, nuestros sentimientos, nuestros retos, nuestros sueños y nuestros miedos nos permite interactuar con otras personas, al igual que construir lazos de confianza y seguridad. Cuando ponemos nuestros pensamientos en palabras, podemos encontrar nuevos caminos que nos llevan a tener esperanza, pues nos permite aprender a afrontar las situaciones tanto positivas como negativas. Por estos motivos, en nuestras familias debemos aprender a mantener una buena comunicación; se deben establecer espacios de comunicación abierta y sincera en donde se brinde un apoyo y se hable acerca de los sentimientos, las emociones y se comparta las experiencias tanto positivas como negativas. La permanente interacción entre los miembros de nuestra familia nos permite generar el desarrollo de vínculos más fuertes, los cuales son fundamentales en el momento de comprender el estado anímico de quienes componemos la familia, lo cual a su vez nos permitirá identificar a tiempo los síntomas y los factores de riesgo a los cuales estamos expuestos.

También debemos resaltar que el mantener una comunicación abierta, respetuosa y tolerante en la familia, facilita la creación de espacios de retroalimentación, así como favorece la resolución de conflictos y la solución de problemas. En este sentido, creamos consciencia de que no estamos solos. Debemos tener en cuenta que cuando nos comunicamos con nuestros familiares debemos expresar lo importante que son para nosotros y debemos decirle cuánto los queremos; no dejes pasar ninguna oportunidad donde puedas mostrar tu amor y cariño por tu familiar. Saber que tenemos personas que se preocupan por nosotros nos hace más fuertes. Por otro lado, en el caso de que se requiera la ayuda de un profesional para superar una circunstancia, una buena comunicación en la familia facilita la búsqueda de ayuda profesional, pues la confianza construida a través de la comunicación favorece el proceso de aceptación de la ayuda externa cuando se ofrece. Igualmente, permite que toda la familia sea más activa en el proceso terapéutico del familiar. Por otro lado, es indispensable que conozcamos las amistades, los compañeros y el circulo más allegado de nuestros seres queridos. Igualmente, que la supervisión de las actividades, de las redes sociales o de cualquier situación es pertinente para la seguridad y el conocimiento de nuestros familiares.

No obstante, para lograr la identificación de los síntomas como de los factores de riesgo, lo más importante es conocerlos primero, por eso los queremos invitar a consultar nuestro artículo, “El Suicidio Se Puede Prevenir”, donde explicamos algunas de las conductas que las personas con ideas suicidas pueden presentar. Recuerde que es vital que no le reste importancia a cualquier manifestación de los síntomas de su familiar, usted le puede salvar la vida, pues se ha evidenciado que en la mayoría de los casos, las acciones de la persona hacen visible la necesidad de atención y ayuda.